Por qué la faja de ostomía no debe ser impermeable: guía práctica para pacientes ostomizados
Las fajas de ostomía son un complemento esencial para muchas personas ostomizadas. Su objetivo principal es aportar sujeción, comodidad y seguridad, favoreciendo la movilidad y ayudando a prevenir complicaciones como la hernia paraestomal.
Pero, aunque pueda parecer ventajoso que estas fajas sean impermeables, la realidad es justo lo contrario. En este artículo te explicamos por qué una faja de ostomía no debe ser impermeable y cuáles son los riesgos que se pueden evitar al elegir un tejido transpirable.
1. La importancia de la transpiración en la piel periestomal
La piel que rodea el estoma es especialmente delicada y está en contacto continuo con el dispositivo colector. Si la faja es impermeable, la transpiración natural queda bloqueada, acumulando calor y sudor.
Esto puede causar:
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Maceraciones cutáneas.
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Irritaciones y dermatitis.
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Mayor riesgo de infección.
Las fajas transpirables permiten mantener la piel seca y sana, evitando complicaciones que afectan tanto al bienestar como a la adhesión de los dispositivos.
2. Problemas de aire atrapado y flotabilidad en el agua
Un aspecto menos conocido, pero muy importante, es lo que ocurre cuando la persona ostomizada se sumerge en el agua con una faja impermeable.
Cualquier bolsa de aire que quede atrapada en su interior tenderá a subir hacia la superficie por la diferencia de densidades entre el aire y el agua, generando una fuerza de empuje ascendente.
Esto se traduce en:
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Incomodidad al nadar o moverse.
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Movimiento del bañador o de la propia faja.
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Riesgo de presión o tracción en la zona del estoma.
Por tanto, una faja impermeable no solo resulta poco práctica, sino también insegura en actividades acuáticas.
3. Seguridad y comodidad como prioridades
El objetivo de una buena faja de ostomía es dar confianza a la persona ostomizada en su día a día. Para ello, el diseño debe centrarse en:
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Tejidos elásticos y transpirables que garanticen confort.
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Sujeción adecuada sin comprimir el estoma.
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Materiales resistentes al agua pero no impermeables, que permitan liberar la humedad y el aire acumulado.
Conclusión
Aunque pueda parecer una buena idea, una faja de ostomía no debe ser impermeable. La transpiración de la piel y la liberación del aire atrapado son factores esenciales para evitar irritaciones, mejorar la comodidad y garantizar la seguridad, tanto en la vida diaria como en actividades acuáticas.
👉 Consejo práctico: al elegir tu faja de ostomía, busca siempre modelos transpirables y diseñados específicamente para ostomizados. Así podrás disfrutar de mayor libertad de movimiento, menor riesgo de complicaciones y una mejor calidad de vida.